En una noche cargada de tensión y emociones en el Estadio Malvinas Argentinas de Mendoza, River volvió a demostrar su temple en las definiciones desde los doce pasos. El equipo dirigido por Marcelo Gallardo venció a Unión de Santa Fe por 4-3 en la tanda de penales, luego de igualar 0-0 en los 90 minutos, y se clasificó a los cuartos de final de la Copa Argentina, donde se medirá con Racing Club, otro de los grandes que sigue en carrera.
El encuentro fue parejo, con momentos de dominio alternado y varias situaciones de peligro en ambos arcos. Sin embargo, ni River ni Unión logró romper el cero en el tiempo reglamentario, lo que obligó a definir el pase a la siguiente instancia desde el punto penal.
Allí, como ya ocurrió días atrás ante Libertad por la Copa Libertadores, Franco Armani volvió a erigirse como figura indiscutida, atajando dos remates clave y consolidando su rol de héroe en momentos decisivos.
Desde el inicio, River intentó imponer condiciones con una formación ofensiva que incluyó a Sebastián Driussi, Maximiliano Salas y Facundo Colidio, mientras que Unión apostó por la solidez defensiva y la velocidad en el contragolpe. El primer tiempo tuvo pocas situaciones claras, aunque Galoppo y Martínez generaron peligro en ambas áreas.
En el complemento, el ingreso de Juan Fernando Quintero le dio más volumen de juego al Millonario, que comenzó a encontrar espacios por las bandas. A los 68 minutos, se produjo una de las jugadas más polémicas del partido: Montiel cayó en el área tras un presunto agarrón de Del Blanco, pero el árbitro Andrés Gariano no sancionó penal, desatando la protesta de todo River.
Unión también tuvo sus chances, especialmente en los pies de Palavecino y Tarragona, pero se encontró con un Armani sólido que mantuvo el arco en cero. En los minutos finales, River estuvo cerca de convertir con un remate de Borja que fue contenido por Tagliamonte, y otro intento de Lencina que rozó el palo.
Armani, el salvador en los penales
La tanda de penales comenzó con precisión por parte de ambos equipos. Mauricio Martínez abrió la serie para Unión con un disparo al ángulo, y Quintero respondió con calidad para River. Luego, Mauro Pittón convirtió con ayuda del travesaño, y Borja igualó para el Millonario.
El punto de inflexión llegó en el quinto disparo, cuando Lucas Gamba remató cruzado y Armani se lanzó a su derecha para rechazar el envío. Poco después, Valentín Fascendini también fue víctima del arquero, que voló espectacularmente para detener el zurdazo. Con River en ventaja, Montiel se encargó de ejecutar el penal decisivo. Con frialdad, tiró al medio mientras Tagliamonte se arrojaba a su izquierda, sellando el 4-3 final y desatando la celebración de los hinchas riverplatenses.
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