La cementera de origen suizo Holcim amplía sus negocios a otros rubros en la Argentina. Tras anunciar en febrero que acordó la compra de Horcrisa, la tercera compañía más grande del país dedicada a la producción y venta de hormigón elaborado, la filial local informó este lunes a la Comisión Nacional de Valores (CNV) que completó la adquisición.
La empresa nació en 2001 y tiene una capacidad de producción de 1,2 millones de metros cúbicos anuales, equivalente a construir 20.000 casas promedio al año. Es dueña de Procrisa, firma dedicada a la fabricación de aberturas de PVC −que en este caso no se vendió−, y fue sponsor de las Selecciones Nacionales en un acuerdo con la AFA en 2024.
Arrancó como un emprendimiento de dos familias de Isidro Casanova y tiene siete plantas de fabricación en la Provincia de Buenos Aires, ubicadas en su localidad oriunda, Pacheco y Caseros. Emplea a 130 personas.
“Iniciamos el proceso teniendo en cuenta que es una compañía con una base sólida en el negocio del hormigón agregado y lleva 25 años prestando servicios en la Provincia, donde queremos fortalecer nuestra presencia y acelerar el crecimiento como proveedor de soluciones”, había señalado en el verano, al dar a conocer la operación, Pablo Bittar, CEO de Holcim Argentina. Seguimos apoyando el desarrollo de la construcción en el país, expresó ahora.
Con 90 años en el país y cuatro plantas de cemento en Buenos Aires, Córdoba, Mendoza y Jujuy, Holcim desembolsó US$ 32,5 millones en la transacción, de los cuales US$ 29 millones serán en una cuota y el saldo restante de US$ 3,5 millones pagadero en tres veces.
De esa manera, la cementera amplía su portafolio y busca que este año el 30% de sus ventas netas provengan de su división ‘Soluciones y Productos’, en la que cuenta con su red de corralones de materiales para la construcción Disensa, con más de 500 franquicias.
Es la tercera empresa que compra en dos años. La anterior fue Tensolite en abril de 2024, que cuenta con dos plantas y fabrica premoldeados y pretensados de hormigón. Antes había sido Quimesur, con su entrada al mercado de pinturas impermeabilizantes. Además, en ese lapso inauguró una planta de pegamentos, aditivos y revoques de la marca global Tector.
Según Bittar, en lo que va de 2025, registraron un 20% de aumento interanual de los despachos de cemento en los distintos segmentos que comercializa Holcim. “El primer semestre de 2024 fue complejo, pero en el segundo asomó una leve recuperación. El año cerró con una caída del 25% en los despachos a nivel nacional”, explicó.
“Empezamos a ver en el último trimestre un leve repunte, lo notamos también en las otras empresas que tenemos. Confiamos en que la estabilidad macro y cambiaria permitirán la recuperación del consumo. El crédito es una variable que dinamiza la actividad”, apuntó sobre la necesidad de contar con esta herramienta.
“Permanentemente, estamos buscando alternativas para seguir creciendo y consolidarnos como proveedor de soluciones integrales de la construcción. Hace dos años, vendíamos 10 productos y ahora tenemos más de 1.000 a partir de las adquisiciones que realizamos”, afirmó sobre la posibilidad de concretar más compras en el futuro. Según sus datos, los insumos que vende Disensa logran cubrir el 80% de los materiales necesarios para construir una vivienda.
Así, mientras Holcim se expande, su rival Loma Negra −propiedad de la brasileña InterCement− hace meses que busca comprador. Su venta se desató por los problemas financieros de su dueña, que entró en concurso de acreedores en su país. En el camino, se frustró el traspaso de la firma argentina al grupo Compañía Siderúrgica Nacional (CSN), también de origen brasileño.