Con una trayectoria que atraviesa cuatro décadas, el Sanatorio de la Mujer de Rosario se ha consolidado como un referente en la atención de la salud integral, no solo de las mujeres, sino de toda la comunidad. En estos cuarenta años pasó de ser una pequeña maternidad a un centro médico polivalente con sedes en distintos puntos de la ciudad.
La institución nació en 1985, cuando se concretó el proyecto de un grupo de profesionales rosarinos decididos a crear un sanatorio médico-asistencial destinado a la salud de la mujer. En ese entonces, bastó la construcción de una primera planta para dar comienzo a este gran desafío.
“Fue una idea que se gestó en un viaje realizado por un grupo de médicos obstetras en 1984 a Estados Unidos. Allí se planteó el objetivo de construir una institución vinculada a la salud de la mujer que abordara obstetricia, ginecología y neonatología. Arrancó prácticamente como una cooperativa médica, donde se juntaban médicos que tenían afinidad personal y laboral”, recordó el presidente del sanatorio, Pablo Quaranta en diálogo con La Capital.
Foto 2.jpg
“El sanatorio abrió sus puertas en 1985, en un contexto nacional difícil y pudo atravesar las distintas crisis del país. Arrancó como una pequeña clínica de obstetricia, que tenía sólo planta baja y primer piso, con 700 metros cuadrados. Ahora tenemos 25 mil metros cuadrados, cuatro sedes, 950 empleados y un total de 800 médicos vinculados a la institución. En estos cuarenta años pasamos de una clínica monovalente a una polivalente”, detalló.
“En 2006, la familia Quaranta se hizo con el control accionario de la institución. Eso nos permitió cierta agilidad: crecimiento y gestión van de la mano. A partir del 2008 se dio el gran salto. Ese año hicimos unos pisos más en la sede de calle San Luis y en 2011 hicimos la guardia nueva. A partir de 2015, arrancamos con la construcción de las distintas sedes”, enumeró Quaranta.
81224309.jpeg
Pablo Quaranta, presidente del Sanatorio de la Mujer
Leonardo Vicenti / La Capital
El crecimiento plasmado en nuevos espacios
En 2015, se inauguró la sede en barrio Fisherton, ubicada estratégicamente en complejo Fisherton Plaza Open Mall. “En 2013 se nos ocurrió la idea de armar una sede en zona oeste porque veíamos que había un faltante de servicio. Justo arrancó el shopping frente al aeropuerto y arrancamos con un proyecto que era la mitad de lo que es hoy y la tercera parte de lo que va a ser algún día. La verdad es que la demanda explotó más de lo que esperábamos. Más allá de la buena gestión había un faltante claro de servicios en la zona. Por eso replicamos en zona sur y norte. Tenemos los cuatro puntos cardinales cubiertos. La idea fue acercarle al cliente la salud a su lugar“.
Esta primera experiencia les demostró a los directivos que la gente demandaba medicina de calidad cercana a sus viviendas o lugares de trabajo. De esta manera, en 2020 se inauguró la Sede Sur, en Paseo Libertad, ubicada en Bv. Oroño 5960 y en 2024 la Sede Norte, en Los Plátanos 295, Granadero Baigorria, ambas con el mismo formato de servicios de salud que la de la Sede Fisherton.
>>Leer más: La salud privada en Rosario tiene tecnología de vanguardia a nivel internacional
Las nuevas sedes de Fisherton, Sur y Norte cuentan con atención en consultorio en todas las especialidades, tanto para adultos como para niños, departamento de diagnóstico por imágenes, laboratorio de análisis clínicos, servicios odontológicos, centros de traumatología y rehabilitación y quirófanos para intervenciones ambulatorias equipado con tecnología de vanguardia y habitaciones privadas y compartidas.
Una empresa familiar
Pablo, Alfonso y Andrés Quaranta continuaron el legado de su padre, el doctor Pablo Quaranta, y se hicieron cargo de la institución médica. “Nuestro padre murió en 2017 pero muchos años antes comenzó a hacer una transición y se empezó a correr hacia algunos temas puntuales que a él le interesaban. Cuando falleció, toda la transición ya se había dado y el sanatorio no sintió nada. Todo siguió normal. Él tuvo una inteligencia ahí al ver que la generación que lo seguía podía continuar y agrandar lo que él había arrancado”, señaló Alfonso Quaranta, vicepresidente del Sanatorio de la Mujer.
81224311.jpeg
Alfonso Quaranta, vicepresidente de la institución
Leonardo Vicenti / La Capital
“Nuestro gran salto se da cuando nosotros pasamos a tener el control de la institución. En 2005 hay una especie de sisma societario y finalmente logramos tener más de la mitad del paquete accionario. Ahora tenemos el 100%. Eso nos facilitó muchísimo la gestión. Si cada cosa que hay que hacer va a una mesa donde hay intereses contrapuestos todo se lentifica y limita el crecimiento. Cuando nos hicimos cargo de la gestión, el sanatorio pegó el salto”, comentó el vicepresidente.
“Esto no deja de ser una empresa familiar. Más allá del tamaño no deja de funcionar como una pyme familiar. La gran ventaja es la celeridad de la toma de decisiones. Las desventajas típicas de una pyme familiar no se han dado porque la relación entre nosotros tres es muy buena, resolvemos, nos ponemos de acuerdo y vamos, y si tenemos que corregir, corregimos”, remarcó Pablo.
“Lo cierto es que también estamos rodeados de gente de mucho valor. Desde gerencia, cuerpo médico, mantenimiento, enfermería. Y esto se notó mucho en pandemia. Todos pusieron su granito de arena y se notó”, comentó el director de la institución Andrés Quaranta.
81224310.jpeg
Andrés Quaranta, director del sanatorio
Leonardo Vicenti / La Capital
La mirada puesta en el futuro
“Siempre intentamos estar adelantados en lo tecnológico. Por ejemplo, en 2001 fuimos la primera institución sanatorial que tuvo un resonador. Hace unos años que estamos con una importante actualización tecnológica, a la vanguardia en equipamiento, staff, tecnología, sistema de software de entrega de imágenes”, remarcó Andrés.
>>Leer más: El Sanatorio de la Mujer toma la delantera en energías renovables
“Siempre aparecen cosas nuevas. Hay un proyecto para agrandar la sede de Fisherton y para ampliar zona norte. También acá en el centro hay dos proyectos grandes: uno edilicio por calle Pueyrredón y otro, que estamos analizando y avanzando fuertemente, que es el tema con la cirugía robótica“, respaldó Pablo.
“La cirugía robótica es lo que se viene. En Buenos Aires ya hay algunas instituciones que lo tienen y ya está arrancando. En Rosario todavía no existe. Hay muchos cirujanos que hace un par de años que se están preparando para lo que se viene. Pero la verdad es que aparecen proyectos todo el tiempo y estamos atentos”, sentenció el presidente.