El hombre, de 41 años, quedó demorado. Los clientes se quejaron del espantoso sabor de la bebida que habían comprado. Las botellas evidenciaban signos claros de adulteración
Un hombre de 41 años quedó demorado por la Policía este lunes acusado de ofrecer a los clientes de un minimarket de zona sur botellas del fernet más conocido, pero truchas. La dueña del comercio lo denunció.
El procedimiento fue durante la tarde, derivado de un llamado al 911 por un hecho de «desorden». Una vez en el local, ubicado en avenida San Martín al 3600, la propietaria del comercio acusó a José Alberto O. de haberle vendido a ella, y luego a los clientes, la bebida alcohólica de marca Branca que estaba adulterada.
La mujer admitió que le había comprado al estafador dos botellas del producto con anterioridad. Y que los clientes que se las llevaron le reclamaron por el pésimo sabor.
Los agentes le incautaron a José O. dos botellas de un litro y otras seis de tres cuartos con la etiqueta «Fernet Branca». El líquido oscuro en su interior, tal la descripción de los oficiales, se presume adulterado a juzgar por las quejas de los compradores.
De hecho, los envases mostraban a simple vista detalles que hacían dudar de su contenido: las tapas a rosca metálicas lucían pintadas y el plástico dosificador interno estaba roto.
El vendedor del «amaro» de origen italiano falsificado quedó demorado en la comisaría 15 luego de que la dueña del minimarket expresara su voluntad de denunciarlo penalmente.