Durante una recorrida reciente se constataron, 32 animales atropellados, incluyendo carpinchos, zorros, aves, tortugas y un yaguarundí
A lo largo de los 59,43 km de la Ruta 174 que une Rosario con Victoria, numerosos animales silvestres cruzan el pavimento en su tránsito por los humedales del Delta del Paraná, poniendo en riesgo su vida y la de los conductores. Tras el fin del contrato con Caminos del Río Uruguay S.A., la gestión de la ruta pasó a manos de Vialidad Nacional, que actualmente está en proceso de licitación.
Frente a esta situación, unas 70 organizaciones ambientalistas solicitaron a la Justicia que se incluyan obras de mitigación en el nuevo pliego, como pasafaunas subterráneos que permitan el cruce seguro de animales. Durante una recorrida reciente se constataron, 32 animales atropellados, incluyendo carpinchos, zorros, aves, tortugas y un yaguarundí, lo que expone la gravedad del problema.
El riesgo se agrava por factores como la niebla, el hábito nocturno de muchas especies, y los incendios en las islas, que desplazan la fauna hacia la ruta. Además, se advierte que los datos actuales podrían subestimar el problema, ya que en invierno muchos animales están en estado de brumación y no se mueven tanto.
Las ONG también piden reducir la velocidad máxima (actualmente de 110 km/h) para prevenir accidentes. La construcción de pasafaunas y otras medidas son consideradas urgentes para proteger tanto a la biodiversidad como a los seres humanos.